Hoy presentamos un plato a base de cigalas frescas que puede servir como entrante para una cena o comida especial.
Ingredientes:
- - Medio kilo de cigalas de tamaño mediano
- - 1 diente de ajo Perejil
- - 100 ml. de vino blanco
- - Pimienta verde
- - Sal gorda
- - Aceite de oliva virgen extra
Ponemos el medio kilogramo de cigalas frescas de Olémarisco a macerar en un recipiente con un chorreón de vino blanco, la pimienta verde, el AOVE, el perejil y el ajo muy picadito.
Una vez maceradas las pasamos a una bandeja de cristal apta para horno en cuya base añadimos un poco del aceite de oliva virgen extra. Es importante precalentar un rato antes el horno durante 3-4 minutos a unos 180º para que nuestro plato quede al punto.
A continuación, preparamos en la batidora una mezcla de todos los ingredientes: el diente de ajo, pimienta verde, el vino blancon, dos cucharadas soperas de AOVE y un poco de perejil.
La salsa obtenida la vertemos sobre la bandeja que contiene las cigalas maceradas extendiéndola bien para que ocupe toda la superficie.
Ahora espolvoreamos la sal gorda por encima (la sal fina resecaría en exceso el marisco) e introducimos las cigalas en el horno durante ocho minutos para un tamaño medio de las cigalas y 10 minutos si se trata de cigalas más grandes, a una temperatura de 180 grados y calentando por arriba y por abajo.
¡Listo! Tenemos unas cigalas con una pinta y un sabor espectacular preparadas para degustar.
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¡Hasta la próxima Olemarisquer@s!